Ha habido muchas veces durante una lectura de Tarot en la que se presta poca atención a las cartas del Tarot. Pero claro esto no es el único factor ya que algunas personas nacen psíquicas y no necesitan mapas para guiarse, estas mucha veces solo tienen que tomar un mazo de tarot sin haberlas visto nunca antes para hacer las predicciones en comparación con alguien que ha estado estudiando el Tarot desde hace años. Sin embargo, eso no significa que las personas que no han nacido psíquicas no puedan llegar a serlo.
Se llega un punto para todos los lectores del Tarot que no nacieron psíquicos, en el que, finalmente, terminan abandonando todas las técnicas aprendidas previamente dada la alta experiencia alcanzada. Cuando sin ellas, pueden proporcionar mejores lecturas y además más precisas. ¿Por qué ha sucedido esto? Ello es debido a las técnicas en que pasaron años aprendiendo y en la que finalmente le ha servido a su propósito. Que guió a los lectores a tener este grado «psíquica en la tierra» ello se debió a que hubo suficientes veces que instintivamente sabían cómo volver allí y de eso es de lo que se trata, volviendo a la «tierra psíquica» naturalmente, sin ayudas.
La Gran Obra:
La Gran Obra es un término que proviene de la alquimia (el proceso de convertir la materia en oro). Que a lo largo de la historia su significado se ha desarrollado. La manera que me gusta pensar en la Gran Obra es el proceso (normalmente a través de diversas técnicas) que conduce a la unión mística del Ser con el Todo. Es a ello que me refiero en cuanto al tema del presente post.
La Gran Obra es la unión de los opuestos. Puede significar la unión del alma con Dios, del microcosmos con el macrocosmos, de la hembra con el macho, del yo con el no-ego. Esencialmente, la Gran Obra consiste en tener conocimiento del propios Ser.
Puede venir como una sorpresa para algunos al enterarse de que la razón principal para la adivinación en la Gran Obra no es para conocer el futuro. Más bien, es para el desarrollo de las facultades psíquicas. Cuanto más se utiliza las cartas del Tarot para encontrar respuestas a las preguntas dadas, más se presentan las corrientes invisibles. Los que han utilizado las cartas del Tarot llegan a un punto en el que las cartas ya no son necesarias para una adivinación precisa. Las respuestas a problemas específicos son simplemente sentidas.
La adivinación del futuro, pueden ser utilizados hacia la Gran Obra.